Rastros es un proyecto que rinde homenaje a las figuras femeninas en nuestros hogares. Tradicionalmente las cocinas eran habitadas únicamente por ellas, pero hemos demostrado que allí no solo se cocina y se limpian platos; es allí donde hemos aprendido de nuestras abuelas, de nuestras madres, hemos conversado, nos hemos cuestionado y hemos crecido.

El proyecto nace con el objetivo de contemplar el recuerdo de nuestras cocinas y los rastros de nuestra infancia en ellas, reflexionando acerca de todo lo que en ella se vivía. Es así, que se genera una serie de imágenes que transitan diferentes estados de figuración y abstracción. Rastros concretos, de vez en cuando poco definidos, pero siempre atravesados por recetas, olores, sabores, conversaciones y pensamientos.

Rastros es una forma de ahondar en nuestras infancias y encontrarnos en las cocinas que habitamos, recordando a esas mujeres, aprendiendo de ellas, que eran y son nuestros referentes. Hoy la cocina ya no es más un espacio meramente de sartenes y trapos limitado a la mujer, hoy es el punto de encuentro con las mujeres que nos alimentaron en comida y pensamiento.